Hoy os dejo una versión del "Next to you" de Police a cargo de la ya mítica banda californiana de punk The Offspring. Los de la manada lo bordan y adaptan el tema aceptablemente bien. Casi 3 minutos de ritmo contínuo del mejor pop-punk americano que se incluían como "hidden track" en su penúltimo disco, el "Greatest Hits", al final del mismo, metido en la misma pista que la versión del "The kids aren't all right", y que sonaba a partir del 5:56. Enjoy this! ;)
sábado, 26 de septiembre de 2009
jueves, 10 de septiembre de 2009
Carta de Carlos Ferrater
En primer lugar, lo importante para un arquitecto es aprender a observar, aprender de todo. Siempre existe una segunda lectura de todas las cosas, desde el objeto más pequeño hasta el edificio más grande.
Es importante conceptualizar las ideas, a partir de ahí desarrollar proyectos para que finalmente aparezcan las formas.
Aparecen 5 definiciones o ideas posibles acerca del concepto de arquitectura:
1. La arquitectura convierte las ideas abstractas en valores constructivos.
Es bueno utilizar los recursos para instrumentalizar estas ideas y, dentro de los múltiples recursos de los que disponemos, la geometría aparece como una herramienta fundamental Existen geometrías simples y otras más complejas pero todas ellas son el instrumento que articula las ideas y las lleva a una situación espacial.
Resulta también relevante sondear las reminiscencias de la tradición y la herencia cultural del lugar para transmitir esta esencia al proyecto.
2. Se podría describir el proceso de la arquitectura como el discurrir de la geometría al espacio.
Hay que recopilar datos de las necesidades del cliente y de otros factores que influyen, para posteriormente organizarlos y a partir de ahí empezar a trabajar en una idea.
Se concibe el proyecto como un cúmulo de piezas más sencillas, que unidas, funcionan como un organismo superior todas a la vez.
3. En la arquitectura la luz juega un papel fundamental y es importante utilizarla como materia prima.
Se percibe la luz como una materia prima más, la de menor coste y de la que un arquitecto puede y debe disponer. En la realidad de hoy en día conocemos, distinguimos y trabajamos con tipos de luz muy distintos y suele resultar muy útil aprovecharlas.
En ocasiones la tensión surge en la frontera entre el exterior y el espacio interno articulado por la luz natural, actuando la fachada del edificio cómo una membrana.
4. Idea de materialidad. Un arquitecto proyecta para construir.
El profesional de la arquitectura elabora un proyecto con la intención de construirlo, idear algo sabiendo de antemano que no se va a llevar a término, no tiene sentido alguno. Resulta importante construir con mimo y de forma lógica y natural procurando no violentar al medio ni al entorno.
La arquitectura ha de tener una razón social y una razón constructiva, una lógica.
Parte importante de la arquitectura es saber encontrar los materiales constructivos adecuados. La idea de utilizar un solo material antes que dos, si es posible, está siempre presente. Resulta importante saber echar mano de los nuevos elementos que hoy en día van apareciendo pero sin que esta práctica llegue a ser abusiva.
Es relevante que entendamos cómo está construida una casa, dado que actualmente en algunos casos, se generan construcciones de las cuales no somos capaces de ver cómo funcionan. Han de tener siempre una razón de ser.
A la hora de proyectar hay que tener presente el concepto de atemporalidad, mirando así al pasado y al futuro para crear elementos que optimicen la ciudad sin buscar un especial protagonismo.
5. La arquitectura como la capacidad de mediar entre las necesidades de un cliente y las posibilidades que proporciona el lugar.
Un buen arquitecto será capaz de encontrar el uso óptimo y adecuado a las peticiones del cliente a la vez que genera un proyecto en armonía y consonancia con el entorno y las opciones del terreno.
Finalmente concluiríamos con un pequeño decálogo que sirva de referencia a los futuros arquitectos:
- La mano se convierte en la herramienta más rápida.
Para articular el embrión de un proyecto la mano es el primer instrumento por el que van a fluir las ideas. Todo comienza con un pequeño dibujo muy básico que conceptualiza la idea. Estos dibujos, sin necesidad de que sean obras de artes deben resultar útiles y estar proporcionados, con medidas razonables, etc…
A día de hoy quizá los ordenadores trabajen más rápido, cómo un brazo más largo, y en ocasiones resultan extremadamente útiles, pero no resulta conveniente abusar de ellos, sino solo utilizarlos cuando verdaderamente sea preciso.
- El concepto da lugar a la forma y no al revés.
A partir de una idea, tras un elaborado proceso, llegaremos a concebir una forma final de nuestra obra. El proceso inverso, pese a ser también posible y realizable en muchos casos, implica graves problemas de viabilidad así como de coste y anula la lógica y el ingenio.
Hay que procurar ser abstractos ya que el estilo, la repetición, la reformulación… dan lugar a la muerte de la arquitectura y a la aparición de un vocabulario repetitivo.
Es imprescindible documentar tanto el proceso como la parte intelectual del mismo.
- El patrimonio de un arquitecto es su obra construida.
El arquitecto debe asumir un riesgo intelectual, debe ‘jugársela’ en cada proyecto sin llegar a caer en lo absurdo. A la hora de asumir dicho riesgo es importante conocer también que cantidad del mismo está dispuesto a asumir el cliente, explícita o tácitamente.
Hay que estar en una permanente búsqueda de cauces de expresión social a través de la arquitectura.
- Cada proyecto es una nueva experiencia en la que poner el reloj a cero.
A la hora de comenzar con una nueva obra, la experiencia resulta un lastre. No es correcto hacer un proyecto mirando y basándose en todo lo anterior porque nos llevará a caer en un estilo repetitivo.
- La arquitectura es una carrera de fondo en la que nunca se llega a la meta.
Cuando lleguéis a ser arquitectos, tras un proyecto vendrá otro, y después de ese otro, con lo cual a partir de entonces entrais en una espiral de aprendizaje y adquisición de experiencia contínuos.
Texto escrito por J. A. Ros basándose en las notas tomadas en la conferencia de C. Ferrater el día 9 de Septiembre de 2009 en la estación intermodal de Zaragoza durante la celebráción del "Seminario de Arquitectura ETSAZ-USJ".
Es importante conceptualizar las ideas, a partir de ahí desarrollar proyectos para que finalmente aparezcan las formas.
Aparecen 5 definiciones o ideas posibles acerca del concepto de arquitectura:
1. La arquitectura convierte las ideas abstractas en valores constructivos.
Es bueno utilizar los recursos para instrumentalizar estas ideas y, dentro de los múltiples recursos de los que disponemos, la geometría aparece como una herramienta fundamental Existen geometrías simples y otras más complejas pero todas ellas son el instrumento que articula las ideas y las lleva a una situación espacial.
Resulta también relevante sondear las reminiscencias de la tradición y la herencia cultural del lugar para transmitir esta esencia al proyecto.
2. Se podría describir el proceso de la arquitectura como el discurrir de la geometría al espacio.
Hay que recopilar datos de las necesidades del cliente y de otros factores que influyen, para posteriormente organizarlos y a partir de ahí empezar a trabajar en una idea.
Se concibe el proyecto como un cúmulo de piezas más sencillas, que unidas, funcionan como un organismo superior todas a la vez.
3. En la arquitectura la luz juega un papel fundamental y es importante utilizarla como materia prima.
Se percibe la luz como una materia prima más, la de menor coste y de la que un arquitecto puede y debe disponer. En la realidad de hoy en día conocemos, distinguimos y trabajamos con tipos de luz muy distintos y suele resultar muy útil aprovecharlas.
En ocasiones la tensión surge en la frontera entre el exterior y el espacio interno articulado por la luz natural, actuando la fachada del edificio cómo una membrana.
4. Idea de materialidad. Un arquitecto proyecta para construir.
El profesional de la arquitectura elabora un proyecto con la intención de construirlo, idear algo sabiendo de antemano que no se va a llevar a término, no tiene sentido alguno. Resulta importante construir con mimo y de forma lógica y natural procurando no violentar al medio ni al entorno.
La arquitectura ha de tener una razón social y una razón constructiva, una lógica.
Parte importante de la arquitectura es saber encontrar los materiales constructivos adecuados. La idea de utilizar un solo material antes que dos, si es posible, está siempre presente. Resulta importante saber echar mano de los nuevos elementos que hoy en día van apareciendo pero sin que esta práctica llegue a ser abusiva.
Es relevante que entendamos cómo está construida una casa, dado que actualmente en algunos casos, se generan construcciones de las cuales no somos capaces de ver cómo funcionan. Han de tener siempre una razón de ser.
A la hora de proyectar hay que tener presente el concepto de atemporalidad, mirando así al pasado y al futuro para crear elementos que optimicen la ciudad sin buscar un especial protagonismo.
5. La arquitectura como la capacidad de mediar entre las necesidades de un cliente y las posibilidades que proporciona el lugar.
Un buen arquitecto será capaz de encontrar el uso óptimo y adecuado a las peticiones del cliente a la vez que genera un proyecto en armonía y consonancia con el entorno y las opciones del terreno.
Finalmente concluiríamos con un pequeño decálogo que sirva de referencia a los futuros arquitectos:
- La mano se convierte en la herramienta más rápida.
Para articular el embrión de un proyecto la mano es el primer instrumento por el que van a fluir las ideas. Todo comienza con un pequeño dibujo muy básico que conceptualiza la idea. Estos dibujos, sin necesidad de que sean obras de artes deben resultar útiles y estar proporcionados, con medidas razonables, etc…
A día de hoy quizá los ordenadores trabajen más rápido, cómo un brazo más largo, y en ocasiones resultan extremadamente útiles, pero no resulta conveniente abusar de ellos, sino solo utilizarlos cuando verdaderamente sea preciso.
- El concepto da lugar a la forma y no al revés.
A partir de una idea, tras un elaborado proceso, llegaremos a concebir una forma final de nuestra obra. El proceso inverso, pese a ser también posible y realizable en muchos casos, implica graves problemas de viabilidad así como de coste y anula la lógica y el ingenio.
Hay que procurar ser abstractos ya que el estilo, la repetición, la reformulación… dan lugar a la muerte de la arquitectura y a la aparición de un vocabulario repetitivo.
Es imprescindible documentar tanto el proceso como la parte intelectual del mismo.
- El patrimonio de un arquitecto es su obra construida.
El arquitecto debe asumir un riesgo intelectual, debe ‘jugársela’ en cada proyecto sin llegar a caer en lo absurdo. A la hora de asumir dicho riesgo es importante conocer también que cantidad del mismo está dispuesto a asumir el cliente, explícita o tácitamente.
Hay que estar en una permanente búsqueda de cauces de expresión social a través de la arquitectura.
- Cada proyecto es una nueva experiencia en la que poner el reloj a cero.
A la hora de comenzar con una nueva obra, la experiencia resulta un lastre. No es correcto hacer un proyecto mirando y basándose en todo lo anterior porque nos llevará a caer en un estilo repetitivo.
- La arquitectura es una carrera de fondo en la que nunca se llega a la meta.
Cuando lleguéis a ser arquitectos, tras un proyecto vendrá otro, y después de ese otro, con lo cual a partir de entonces entrais en una espiral de aprendizaje y adquisición de experiencia contínuos.
Texto escrito por J. A. Ros basándose en las notas tomadas en la conferencia de C. Ferrater el día 9 de Septiembre de 2009 en la estación intermodal de Zaragoza durante la celebráción del "Seminario de Arquitectura ETSAZ-USJ".
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